-¡Te dije que no me volvieras a prepapar esos mejunjes para cenar!
-¡Es lo único que me dió tiempo a cocinar! ¡También me tengo que encargar de la maldita tienda!
-¡No me hables así Ann!
-Gññññgggññgg
-¡Te hablo como me da la gana!
-¡Sabes que tengo azucar y te entra por una oreja y te sale por otra!
-¡Cuando no te conviene algo me sales con el azucar!
- ¡Pero será...!
¡¡BLAM!!
- Ayuggggdañññme, ayugggda, mgggeee pegggsigueñññ loggg muegggtogggg...
- Dios mio...
domingo, 8 de febrero de 2009
Página 0
Publicado por
NVS
en
10:16:00 p. m.
Etiquetas: La vida en Ipsópolis
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
¿Son tuyas las ilustraciones?
Geniales como los dialogos.
Saludos desde el Otro Lado.
Promete.
Publicar un comentario