Sabes que te estás muriendo cuando todo cobra sentido al fin, como en los sueños. Cuando realmente entiendes que avanzar hacia delante es lo mismo que mostrar tu cariño a la que siempre ha caminado contigo hacia atrás. Cuando el rojo suena a fa menor y los límites del espacio de tu cama son al mismo tiempo Eritrea y un fermión. Puedes notar en tus entrañas como late tu vejiga y eres incapaz de aguantar la orina, rancia y espumosa, que se escapa como tu vida. Es el miedo atroz, primigenio y salvaje, es ahora cuando te sientes mas humano que nunca, solo, perdido sin posibilidad alguna de retorno. Como se evapora el tiempo. No merece la pena gritar, sabes que vas a partir solo pero nunca te habías planteado que sucedería en este instante, ni siquiera hiciste las maletas para el viaje más famoso y menos esperado de la historia.
Nunca es ahora y siempre es ayer, no llores y manten la calma, es la hora de cambiarlo todo por la nada.
Nunca es ahora y siempre es ayer, no llores y manten la calma, es la hora de cambiarlo todo por la nada.